No solo no juega en Nacional, la otra preocupación de Tomás Ángel

Para nadie es un secreto que la situación de Tomás Ángel en Atlético Nacional es completamente injusta y desgastante. Pagando los platos rotos de una relación entre su padre, Juan Pablo Ángel, y una junta administrativa inmadura que actúa por intereses propios y no por el colectivo.

En el tiempo de Alejandro Restrepo tuvo por lo menos 5 partidos de titular y desde Hernán Darío Herrera ya no ha podido jugar en el primer equipo del verde paisa. Aún así, la hinchada lo pone como uno de los mejores jóvenes, por no decir el mejor, que tiene el conjunto verde paisa. Un talento joven que sin duda está siendo desperdiciado.

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Los intereses propios han salido por encima del rendimiento futbolístico de los juveniles en Atlético Nacional. Jaider Asprilla no para de tener oportunidades en el equipo profesional y poco y nada a mostrado, en cambio, jugadores como Tomás Ángel terminan estancados en su carrera por situaciones fuera del terreno de juego. 

Y parece un chiste mal contado, si se tiene en cuenta que lo que más quiere la junta administrativa de Atlético Nacional es vender jugadores y ganar dinero para poder cuadrar caja y tener un colchón para los fichajes del 2023. Un jugador que tiene mercado internacional y por el cual, seguramente, muchos clubes vendrían a preguntar es el número 21 que ahora tendría una nueva preocupación.

¿Cuál es la nueva preocupación de Tomás Ángel?

Hace pocas horas se conoció la noticia que en la ciudad de Medellín se había presentado un incendio en un penthouse de las zonas más caras de la ciudad. Lastimosamente, este apartamento pertenece al papá de Tomás Ángel, Juan Pablo Ángel, lo que sería una nueva preocupación para el borrado del equipo profesional de Atlético Nacional.