Lo dejaron irse a Águilas y el gesto de Atlético Nacional con Orlando Berrío

Orlando Berrío a sus 32 años de edad es uno de los recordados ex jugadores de Atlético Nacional que formó parte del equipo que alcanzó la Gloria Eterna al ganar la Copa Libertadores del año 2016, un goleador nato que viene de estar en varios equipos del extranjero.

Orlando Berrío en el año 2022 regresó a Colombia tras estar en el América-MG de Brasil, el jugador estuvo entrenando en la sede de Atlético Nacional para ponerse a tono físico pero no firmó con el cuadro Verdolaga y se fue a Águilas Doradas donde le abrieron las puertas.

Asimismo, Orlando Berrío en el año 2022 dejó claro por qué no volvió a jugar con Atlético Nacional: “El tema de Nacional es bastante largo, pero no quiero entrar en polémicas. Simplemente el club ya tenía armado su grupo, unos objetivos y unas directrices para este semestre, que habían acordado antes de yo haber llegado; y esas ideas no las iban a alterar”.

Orlando Berrío en ese momento destacó que desde el inicio sabía que no tenía cabida en Atlético Nacional en el grupo que tenía Hernán Darío Herrera: “Desafortunadamente no se dieron los tiempos, me lo expresaron desde el primer momento. Intenté entrenarme acá y que vieran que estoy al 100% por si tenían alguna duda; todos los compañeros y el profe lo vieron, pero ellos ya habían tomado una decisión”.

En otro orden de ideas, Orlando Berrío el 14 de febrero de 2023 celebró su cumpleaños y Atlético Nacional en las redes sociales lo recordó y por eso comentaron: “Campeón de América y autor de uno de los goles más gritados por nuestra hinchada. ¡Feliz cumpleaños, Berrío! @oberrio28”.

El valor de mercado actual de Orlando Berrío

Orlando Berrío a sus 32 años de edad juega en Águilas Doradas y su ficha en valores de mercado se cotiza según Transfermarkt en $600 mil dólares. Berrío en su carrera acumula los siguientes números por ahora: 264 partidos jugados. 42 goles marcados y 35 asistencias. Berrío es un jugador que aprecian los hinchas de Atlético Nacional porque de verdad sudaba la camiseta.